Sabado, 4 y media. Temprano busqué a mi compañera de peloton y mano derecha, mi hermana, hicimos unas tempranas diligencias en tierras enemigas, pero la aventura realmente empezó en la clinica Avila. hora 11am.
Nos preparabamos para donar sangre, comiendo unos ligeros sandwiches, yo habia comido antes tipo 8 una cachapa, por lo tanto no tenía tanta hambre, mi hermana no comía desde el dia anterior a las 5:30, por supuesto deliraba del hambre. 15-20 minutos despues de el desayuno en el cafetín, nos encontrabamos compartiendo camas, mientras que un delgado tubo conectado a nuestros brazos, servía de conducto para llenar unas pequeñas bolsas de sangre, no tenía idea la capacidad de dichas bolsas, pero parecía ser bastante. A los pocos minutos se acabo el episodio y nos dirigiamos a una habitacion de una conocida, con nuestros respectivos parches en el brazo. Cuando de repente mi hermana me muestra sus manos blancas y se desploma completamente encima mio desmayada, mi reacción brinca en asombro y llamo a unas enfermeras que inmendiatamente se acercaron con silla de ruedas, caramelos y todo. Alexandra (mi hermana) regresa en sí diciendo cualquier vaina, con nauseas que terminan llevandola a vomitar el reciente desayuno.
Esto continuo unas horas, hasta que despues de un toddy caliente, 1 ponque, 1 Nestea y mucha agua con azúcar, tenía fuerzas suficientes para caminar hasta el carro, a esta hora reside en su casa, pero me dio como lección comer al menos una hora antes de donar sangre, y que sea un buen desayuno por favor, donar sangre no es joda, realmente puedes pasar un mal rato.
/gty
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